Coches híbridos enchufables : ventajas y desventajas
Breve introducción al automóvil
Antes de hablar de los coches hibridos enchufables es necesario que hagamos un breve inciso dedicado a los automóviles de forma general. Y es que los automóviles se han convertido en nuestro medio de transporte preferido, gracias a que además de cumplir a la perfección la tarea principal para la cual fueron creados; nos ofrecen todo tipo de prestaciones accesorias y comodidades, que hacen que su uso sea mucho más placentero y seguro, en comparación con sus alternativas.
Convirtiéndose con el paso del tiempo y el desarrollo de la tecnología: en verdaderas maravillas de la ingeniería, sin nada que envidiar, al mismísimo mecanismo de Anticitera. Es por eso, que un automóvil para su correcto funcionamiento, depende de diversos sub-sistemas. Dichos sub-sistemas son:
El motor: El corazón de nuestro coche, transforma la energía acumulada - ya sea en forma de combustible o energía eléctrica - en energía mecánica. Es el encargado de dotar de movimiento a nuestro vehículo.
La caja de cambios: Encargada de controlar las velocidad a la que se mueve nuestro vehículo. Funciona por medio de engranajes de diferentes tamaños que son conectados al cigüeñal mediante el movimiento de la palanca de cambios.
La transmisión: Es el sistema encargado de conectar el movimiento que produce el motor con los neumáticos del vehículo.
La dirección: Tal y como su nombre indica, nos ayuda a que mediante el movimiento del volante; podamos elegir la dirección de la trayectoria de nuestro vehículo. Esto lo hace, transmitiendo los movimientos del volante a las ruedas delanteras. Existen varios tipos: La mecánica, la electro-hidráulica y la electro-mecánica o eléctrica.
El sistema eléctrico: Está compuesto por aquellas piezas que para su funcionamiento, requieren del uso de la electricidad. Como son: La centralita, el cuadro de instrumentos, la radio, o el alternador.
La suspensión: Es el sistema encargado de amortiguar los impactos sufridos por las ruedas debido al contacto de estas con el pavimento.
Los frenos: Son una parte importante para la seguridad del vehículo y el conductor, ya que detienen el automóvil cuando así lo requiera el conductor.
Pero sabemos que toda invención del hombre debe actualizarse a medida que se exige más para que la cotidianidad se nos haga más fácil, el principal objetivo de las industrias es crear y ofrecer automóviles de mayor calidad, rendimiento y fiabilidad. Sin olvidar desde luego el ahorro. Y es precisamente pensando en esto último; que nacen los vehículos híbridos.
Diferentes tipos de Automóviles según su motor
Automóviles convencionales: Utilizan combustibles fósiles para el funcionamiento del motor. Tales como el petróleo, la gasolina o el gas natural comprimido.
Automóviles eléctricos: Tal y como su nombre indica, utilizan un motor eléctrico en lugar de uno de combustión. En lo referente al resto de sistemas y componentes de un automóvil suelen ser prácticamente idénticos a los convencionales.
Automóviles híbridos: Están compuestos por un motor de combustión interna y uno eléctrico. Dicha característica los convierte en vehículos excepcionales en cuanto al ahorro de combustible se refiere. Ya que el uso del motor eléctrico reduce el uso del de combustión, y por tanto el consumo de combustible.
Breve historia del automóvil híbrido
La historia del automóvil híbrido empieza a finales de la década del 70. Cuando en 1969 la por entonces todopoderosa General Motors da a conocer 3 prototipos de micro-coches: Uno eléctrico, uno de combustible y otro híbrido. Estos modelos al ser solo prototipos no llegaron a ser fabricados de forma masiva, y mucho menos vendidos. Amén de que sus prestaciones eran prácticamente anecdóticas.
Sería a finales de los 80 y principios de los 90. Cuando las grandes marcas empezarían a apostar en serio por la investigación y el desarrollo de los híbridos.
Es así que en el 1989 Audi presenta el Audi Dúo. Básicamente un Audi 100 Avant quattro al que se le había agregado un motor eléctrico de 12,6 cv. Contaba además con baterías de níquel-cadmio capaces de aportarle una autonomía de 80 km.
No habría otro intento serio de crear un híbrido comercializable hasta el año 1997. Año en el cual, Toyota lanza el Toyota Prius. Pensado este en primera instancia para el mercado japonés, pero que gracias a sus excelentes datos de venta; se comercializaría a nivel mundial 3 años después.
Ventajas de los híbridos sobre los automóviles convencionales
1 - Son más respetuosos con el medio ambiente: Si bien no están al mismo nivel que los eléctricos; si que emiten menos gases contaminantes que los vehículos convencionales.
2 - Te permiten ahorrar combustible: Gracias al uso constante del motor eléctrico, los automóviles híbridos pueden ahorrar entre un 30 al 45% respecto a los automóviles convencionales.
3 - Poseen la mayor autonomía del mercado: Además de permitirnos ahorrar combustible, el uso del motor eléctrico aumenta la autonomía de dichos híbridos hasta un considerable 30%.
4 - Necesitan poco mantenimiento: Debido a que usan motores de gasolina, necesitan mucho menos mantenimiento que sus contrapartes fabricados con motores diesel. Lo cual los hace más fiables, y como es lógico abarata su mantenimiento.
Principales desventajas:
1 - Son costosos: Comparados con aquellos vehículos del mismo segmento y de un solo motor; no hay atisbo de duda. Los automóviles híbridos suelen ser más costosos que sus competidores.
2 - El ahorro de combustible se limita a la ciudad: Si, como lo has leído, los híbridos suelen ser muy buenos ahorrando combustible cuando circulan por la ciudad; pero dicha ventaja se pierde una vez tomas la carretera. Esto es debido a que en la ciudad es común circular a velocidades inferiores a los 50 km/h, velocidades a las cuales no hace falta hacer uso del motor de combustión; y por lo tanto usando el motor eléctrico se logra ahorrar combustible.
Presente y futuro
Casi nadie alberga duda que los automóviles eléctricos son el futuro. No obstante a día de hoy, ya sea por sus elevados precios, por su limitada autonomía, o la falta de más cargadores públicos conectados a la red; es poco probable que el automóvil eléctrico reemplace al convencional en un futuro próximo.
Y es ahí precisamente donde los automóviles híbridos pueden ser una más que buena solución para bajar nuestros niveles de contaminación, sin sacrificar, la autonomía esperable de un automóvil convencional.